domingo, 10 de noviembre de 2019

El Proceso de Kafka, el manifiesto más implícito de la terrible existencia humana. Gajaka II y su pecado de opinión.





Jeremy Irons cómo Kafka.

Cualquier descripción, sin decripción, de una mirada es insignificante. El Proceso o en el proceso del señor K (segunda parte).

Por Gajaka II, primo o número primo, divagaba incandescentemente, enredo en la lámpara.

Que vengan los kafkianos, y sale Elías Canneti, desfogado, y Deleuze convencido de su advenimiento. El discurso de la Academia si ha sido suficiente, lo siguen (a usted), y más si va meditando en la partida clásica de una mujer.

Pobre K, solo se había dado un beso en público, y ya el tío de ella lo increpa y le sube a sus faltas graves como el fascismo ordinario, convirtiéndolo en un perro.

El discurso metafísico descompuesto, obsesiona los tumultos (Auschwitz para Imre Kertézs) que no sean etruscos. Porque es el mismo de siempre desentona, solo que cuida de rizar su pelo ante el asombro. Y sé contralto en la cámara de gas.

Yo tenía un amigo, Peter, que ni corto, ni perezoso, se llevaba el bulto en el hombro imitando a la atleta etíope, es una loba independiente. Cállate K. Un poema al cedro, al espino y al limonero, y córtense los extremos.



La muchacha del Café.

Kafka en la piel de Jeremy Irons, La verdad oculta (1991), es más una reivindicación que una caricatura de si mismo, pensará el padre, porque mamás no piensan, y son así, despidiéndose. Una mujer, Teresa Russell, es así por fuera de la relación de pareja simbolizada, la progresión geométrica del monte apenino (a la cabeza, jajaja).

El insecto que crece hasta la altura de la papilla, suficiente las pruebas en su contra. Dirima su soledad en un desierto pintado de tríos de jazz, o las llamas confusas de su apreciación: son camellos que ruedan hacia el rio de la muerte. Grita el oliloquio, sin s, solo, y compruébelo, no sabe saludar como es.

K hubiera podido pulir los lentes de Spinoza, ser lo que es, lo condena a la observación estúpida de los humanos que apenas afloran una sonrisita para condenarlo. La ética no existe en el Derecho, tiene razón el paraco (nombre bíblico).

Que es imposible tocar al insecto, si lo torturan con el chorro de una manguera, ahí, no se sabe cómo va a sobrevivir sin una caricia de terciopelo. De niño le cortaba las patas a los animalitos que dibujaba, así el dolor es total y aplastante.


Romy Schneider y Antony Perkins en El Proceso de Orson Welles.


Ahora que si nos vamos, positiva (mente) hacia Oklahoma, veremos a un Kafka que fue cineasta en Hollywood (le consta a Orson Welles), desviando los presupuestos para un tren bala, entre tu vida y la mia, Milena.



Tiene que ocurrírseme un milagro trepándote por la muralla, la pobre descendencia de un vampiro obcecado por el mismo cuerpo desnudo, entre (a putrefacto coco). No, Kafka victamínisa el confort prusiano.

Quizás todos hemos tenido un señor K, el poeta Kozer (Un campo de achicoria), que no deambulaba, ni necesitaba la estación central para observar, y el adivino que hay, una suerte de ilusionismo en ese párrafo abierto. O el maratonista desnudo.

No hay que pensarlo dos veces, era no político, sino era demente, si las cuadrigas son arreglos de la modista Joséfina Pinta Pinta. K los tiene ahora a punto de escupirle la cara al detective de ojos verdes, que de seguro es caníbal.

La poesía kafkiana más parecida la vemos en Pessoa, sonrisa de presidio, la suerte encantada, pero el hígado de cucaracha. Tan sagrados sus libros, que a pesar del degüello, llegan a una masa estudiantil polarizada, olvidada de la esclavitud de castillo, saca las alas de la reencarnación, vuelo recreacionista en el infierno decoroso del siglo XX.

A mi alter ego (jazz).





Dibujos de Kafka en la oficina.


12 comentarios:

  1. El novio de Mónica.10 de noviembre de 2019, 12:40

    Gajaka y no mencionaste a Rommy Schneider, en ninguna de las dos entregas.
    Qué te pasa, ah?

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  2. Paraco es parásito en la Biblia.

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  3. ya has paseado tu intrépido velocípedo poético por todas las K
    del kontinente semita …

    Kafka
    Kanneti
    Kertézs
    Kozer

    tan solo te falta Mr. Klein

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  4. Comas ni con la K de kopelia califica como helado hasídico...
    (puro colesterol bizantino)

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  5. Anónimo que te escucha11 de noviembre de 2019, 8:05

    Comas más judio que Kozer, abligantinosomo, cómo escribe un neoberraco Mayor.
    Asidico y issiano, anti todo.

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  6. Hablador
    Tejedor de paja.

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