Mandarin Carroll y su texto sobre Friedrich Nietzsche en la Cuarentena, los ditirambos nos siguen cómo piedras filosofales.

¿Qué más exposición para un pichón de corneja?

Que rico ver a Rilke en el Castillo de Valois (antes de morir). A Nietzsche en Génova cobrando un cheque, su Cuarta parte de Zaratustra; somos injustos con Edgar Allan Poe. Todos se llamaban así.

Nietzsche II

Por Mandarin Carroll, (que fue modelo de reglas viejas, las neoinquisidoras, y de algunos juicios apriorísticos).

Dentro de poco quemaré algunos de mis cuadernos, menos el de mapas de América Hispana. 

Algunas obras de teatro, hoy patéticas. Diarios apasionados. Voy a llorar de no verme muerto.

La poesía navega por aguas profundas a donde no llegan los poemitas escritos en papel higiénico. Hágale a la hurra urrraaaca, subiendo el tendón de la irisada danza rusa.

La gaya ciencia. El libre pensamiento. Tono desenfadado, contra el romanticismo y la teología, bailó primero que nosotros. 1882.

Su mirada hacia la demencia que viene, al hombre moralista, a su amistad con Lou Andrea Salomé (la mujer de un zariano). El devenir de un encuentro humano demasiado humano, título de otro de sus libros. Reírse de si mismo.

Para Lou Andrea, primero Nietzsche luego Rilke, son piezas de un viejo piano polaco con letras bocabajo.

Buda de Thailandia. Foto de Loli Cienfuegos.

Habían nacido los Milosz, (que conste) y la princesa rusa subió a los mismos cielos. Aforismos  que enceguecen a un nuevo Edipo. La fiebre de este oro. La gaya ciencia y Lou Andrea, la mujer es la que baja a los infiernos, la felicidad es desconocida para ellas. La Salomé estaba que le partía la cabeza.

II

Valores de amistad, es según el siglo de la razón, una visión del mundo, cuando se niega absolutamente, y los nuevos fiscales justifican su castigo porqué había que sobrevivir cómo juez.

Los pecadores en el manto católico, si los otros, los judíos negaban en el marco del libro divino, sin santos, aunque San Antonio nos toca muy temprano, a la cola de las reyertas salómonicas, el instinto de tirarse a los brazos de las ridículas carmelitas. Funcionó para san Juan de la Cruz.

Los escritores rumanos odiados por la dictadura stalinista de Rumania. Cioran, Ionesco y Mircea Eliade. París, 1977.

Un vivir sin el amor, dijo Fritz, o repugnante, por eso ellas, infecundas han sido aisladas del rayo de la redención. No pueden ser paganas. Rilke en Valois amo absoluto del mundo, nos abandonó  temprano en el mes de enero. 1926.

El eterno retorno, hay algo más hermoso que esto, y los superhombres, los últimos nihilistas, más allá de la esencia del deseo de Shopenhauer, ¿su supresión?

En donde se hace el ser ante la voluntad de poder, luego la nada, mientras no nos mate el Corona Virus, la nada que nada tenía que ver con Sartre y su fenomenología. Solo nadamos en el existencialismo ateo, mientras la religión de la madre te ata a la vida de los santos.

No soy nada, nunca seré nada. No puedo querer ser nada. Aparte de eso, tengo en mí todos los sueños del mundo. Fernando Pessoa. Aparte de eso, es el epicentro gráfico de toda huida, exilio.

III

Nuestra Metafísica preferida  es acción crítica en Nietzsche, nuestra singular materia de formación independiente, Nietzsche regresaba con Bataille (Acerca de Nietzsche), dentro del antifascismo.

La libertad es sagrada, ahí van los jabalíes por entre el pueblo empedrado. ¿Y yo vestido de mitología griega, cómo hago? Cómo Scardanelly, con magia y poesía.

Buscas los askesis, que te acercan al aforismo, al poema, y hazte siempre las dos preguntas de la una. Nietzsche vio a Cristo en Ecce Homo (Cómo se llega a ser lo que se es), funciona patético. Leería a Miguel Servet, y la salvajada inquisitorial de Calvino, poeta narciso.

Antes de la pandemia, posiblemnte Gabriel del Casal, aunque a usted le parezca patético. Foto Loli Cienfuegos.

La muerte de Dios en la Gay Saber, es la del cristianismo, incluido Calvino. El heterónimo Álvaro de Campos, nació un 15 de octubre cómo Nietzsche. Pessoa leyó las ediciones revisadas, publicadas por su hermana de F. Nietzsche en 1907.

Es la pregunta por el ser, la metafísica olvidadiza, pero antes estaban los Atomistas, y al fondo el azar, Epicuro.

A Loli y C.E.O.

A R T E    B A R R O CO.

En el día del idioma, un poema filosófico poético, de Gajaka Extra (s) mitico. Poema a la libertad nietzscheana.

Allen Ginsberg y Neal Cassady.

Poema filosófico poético I ... Para el día del Idioma.

La voluntad de Dominio, el futuro del Nihilismo, una sumisión, casi fe, Budismo último. Y lo más exacto, la negación del juicio. Nietzsche ve pasar a la pequeña china dizque a lavar.

Por Gajaka Extra (s) mitico

Y a todas estas, los juicios morales cristianos y socialistas, están al orden del día; qué sentido tiene esto, sin ambages, en darle a su existencia un castigo o infierno, qué degeneración?

Mi versión, de haber sido escrito en el siglo 17. El 21 es nuestro siglo, los que se han salvado de la nueva inquisición, y hasta ahí llega el Nihilista filósofo.

Ud es una mezcla populachera, y el dictador mestizo, lo desterró al alto Engadina, es un buen chiste, si fuera Siracusa 2500 años atrás. Toda decadencia permanece, dice Nietzsche, y yo en acrecencia (y me rio de antiguas bocas). Apretado sin silencios, respirando la pandemia.

Que obstáculo esa esperanza, así le grita la libertad, era tan difícil en Alemania, la de Lutero, Kant (no Petra Vont Kant). Goethe, parranda de moralistas. ¿Si no es el demonio de la mitología griega, para qué? Se los gritó Nietzsche desde Bayreuth con Wagner (rey de los bárbaros con la música).

Se le notaba a Nietzsche su parecido con un soldado nazi, dice el crítico argentino, más allá de Borges. El hombre del placer in saciado, no me cuadra la raíz de punta. Lo sabía todo, e ignoraba el neobarroco, según él, no había sistema poético para acomodarse, ¿Y si moría el Modernismo americano, todo a base de Poe? Lezama dio a Cuba nuestro salvador.

Si, claro, si llegaban los platos de faisán, ¿De dónde salió el primer cañón? Y la pensión de Nietzsche (a los 36 años), podía repasar las playas italianas, mientras no fueran mías. Hay que salir a bailar, eso es lo que no se sabe, los valores mitológicos, la bailarina flamenca, es la que más se acomoda.

¿Si, usted vio al soldado nazi Nietzsche, atacar al débil, y lanzadlo a la cámara de gas>? Ese no medita, solo, sin voluntad, la impotencia, la decadencia y la moralina. Era el soldado enfermo, el simulacro es la antinomia, hasta Kant opinó. Voluntad de Dominio. La gran contradicción (la antinomia), creo resuelta por la poesía fragmentada. Única de Nietzsche. Kerenji decía, Nietzsche vivía acabado.

Pues Nacimiento de la tragedia, supera a todo lo moderno, por fuera del barroco. Kerenji se tragó sus palabras.  Era un crítico de Dios, el que no cura su enfermedad. Ya existían, la bella y la bestia. El mostacho no cucaracha de Nietzsche contra el mostacho tipo cucaracha de Stalin.

A Moises Kisling, un pintor, un heteronimito.

Paul Elmer Mures y su Nietzsche.

Gabriel del Casal, recibiendo todos los aplausos, le queda corto su heteronimito, pero tiene un clarinete en codo con un piano.

Cuándo competía en actuación con Flora Martinez. Sucia, fea y cochina. No Flora.

Hay que saber lo que no se puede saber, es con f’’ormula, la Uno, cuál

 de los dos, el neumólogo o el neurocientífico, con pocas neuronas?
You don't know what you don't  know.

Por Gabriel del Casal (heteronimito favorito de Las Diago, más no de las Chamorros).

Para comenzar compré naranjas del Líbano, y no protesté, para qué, solo en esas naranjas que quería Franz K.. Hodges y Webster, recreacionistas de lujo. Magister Dixit. Hacía lo sagrado el libro mágico. El hombre con atributos (¿? Solo Alá). Okey, y no han regresado los pajaritos, ¿cómo pretender saber su misterio, su miedo? De caldera hasta los cojones.

Almacenando poco, Spinosa, hay que hacerlo cortito, cómo lo hizo la Pulga Hampona. Ahora vive en Tamalameque, en dónde tembló 5.1 y por poco se hunde en el río Magdalena, La pulga tiene vacas, cuadro perfecto de un Rimbaud por Abicinia.

Diálogo Uno

Montemos Macbeth, no es bueno morir así? Cómo? Actuando. Mira ves esas, nada, esas ardillas, no cardenales  impuros, muertos de la risa, las águilas blancas los respetan. Eso no lo tengo muy claro, ve tu, si eras mi enemigo por contienda. Un genio todo un genio. Se murió el de la cuadra, y nunca más se sabrá de Epicuro y de Demócrito de Abdera.

Fin de partida.

Qué es qué es, el atributo del Dios helénico, si dilo, cómo con Perlongher y Echavarren. P allá iba la Pulga hampona. No señor, no es traqueto culturalmente hablando, enseña a Spinosa. Es más la ingeniería abarcada, que los planes de desarrollo. Rimbaud en escena: me he ganado 100 reses de ganado conversadito. Este me vió el c.u.l.o.t.e.

Solo quedaron los hombres que venden leña, que leen un libro por décadas, Las uvas de la ira, The Grapes of Wrath, y así respetan al vecino. ¿Por favor qué lleva el río? La colina de los lagartos sapos y amedrentados cuadrúpedos de dunas solitarias.

Diálogo dos

Fin del guión, baile de máscaras, Dioniso se achica, la peste humana ha vuelto a poner sus dedos en la mortalidad degenerada de seres cómo si nunca pasaron al otro lado de la muralla. Aquí queda el orden establecido.  Lo clásico es un concepto ignorante, no incluye al jazz entre la locura. El dios se quita las garrapatas.

Ahí sí, sube el violín en el Triple concierto de Beethoven, Escapad gente tierna que esta tierra está enferma, con esa dosis serrática, comenzamos, caminando por el espacio.

Serenate, (por dios que no es Mingus).

Alcanzamos a ver las naves, casi nunca cuando se van. No por eso dejamos la primera vez para el olvido. En Mitología no cabe. La mordedura del tiempo, el suicidio de Trufaut, se desplomó del telón de 1984.

El festejo de los gestos: Carlos, Elmer, and mi, tu su.

La muerte crea sus diferentes formas de martirio, los amantes del amor, lo dije para mi, con ese sofistis de Trufaut. Los distintos enlaces, y uno llega directamente al campus magnético, doble acción, y partir, no importa que luego caigas a un abismo con agua bendita. La dama del perrito está libre de la pandemia. El perrito de Lezama para mirar por las ventanas.

La montaña mágica está plagada de ingenieros llamados Hans Castor. Llevan dos flores en cada bolsillo del ancho pantalón. Siempre las chicas son agradables para el escritor, ¿no hay una coja cómo la señora Smith? Ah, pero después vino Muerte en Venecia. 

Thomas Mann si pudo ver a Dioniso cuando lo trasportaba, y era toda una dicha, verlo e imaginárselo.

La diosa era la sola, la reina, sabía ejercitarse, para cuando la pandemia pidiera sus frutos individualizados, los sacrificios infrahumanos. El laberinto inviolado. Mientras cae la tarde el cerebro es mayor que la conciencia. No mueras.

Para mis enemigos

caseros, es lo pior.

Hay que saber lo que no se puede saber. You don't know what you don't  know.