Yogananda collage. Gajaka crippi.
Diario de un loco con interlocutor:
Un antecede que regula otro, hasta
hacerlo picadillo en la boca que atraganta. Pausa a una tormenta.
Por Gabriel del Casal
I
Maluco.
El hombre de hoy no se parece a mi,
sino por la curva turdas de la noche negra del Atlántico, que no percibe la
horrible nada. No es un clima ideal, es la curva turdas, maneras de hacer las
cosas
antes que la inquisición mande su
castigo ejemplar.
Es la Parte maldita que se desdobla
en pedazos como salmón asado, con fines recreativos.
Hasta el momento de libertad nada, tetas?
Mejor esconda sus dedos romanoides, va a faltar el arroz. No en la costa del
marfil, que va que arroz… arrow mon a mu.
II
Si no hay fronteras se perderá en la
llanura, sombreros cada vez más anchos pero en la pasarela de Milán, la semana
de la moda. Yo miro de infarto tu lánguida imperfección.
El peso de las culpas se cae como un
techo viejo, ni con el pétalo seco del faisán. Apuesto etrusco de La Habana.
Que te hacen el milagrito, en que
escala mi mijo, pero se hace, y cada uno por lo suyo, mientras la madre
envejece de ansiedad, y un corrientazo de vida en la sublime reina de Corinto y
sus desterrados hijos de Edipo en Crotona.
III
Semicondenado por seudoteniente
coronel, solo apuntaba al mar de Crimea. Vaya barbaridad.
Con el paso de las hojas en blanco
donde mora la poesía no cupieron en un solo cajón, las que iban para el editor
estrella. ¿La marquesa de O la hermana de la Medusa?
¿Dios mio no te detengas, o quieres que vaya yo; le impresionó a Paz o más
a Novo de Pita Amor?
Alas incautas imprecisas y violentas,
pesadillas sueños somnolencias, gritos
de la diosa perdida que busca a su otro yo, aunque sea en forma de víbora. Para
redimirlo.
IV
La drogadicta escena del sanatorio, y
la diminuta pena del canto, dos cosas bien distintas. Hazlo saber Jung.
Si me han condenado para quererte,
entre canas, peluqueros que se comen los animales domésticos.
La confianza en el ser que va más
allá, de todo y de mi, lanzo mis canas al aire metafísico, y que de allí
ofrecerla a los dioses pequeñitos.
Un helado en Budapest, de Claudio Magris, para subirle el tono a la elocuencia y a ese vasto
valle del Danubio. Haces un puente y se liberan todas las deidades, hasta aquí
llegaron los bazares, y ese afán de hacer castillos imposibles para sobrevivir.
V
Predicas el amor y la bondad, pero
porque estás en la India Meridional, pero cuando viene un tsunami, todos vienen
hacia ti. En el centro del mundo y de la tierra, donde el verde es de
esmeraldas.
Los fusas, confundida la crónica con
la presencia desencadenada siglos atrás. Encima el encierro de las vacas,
porque no hay toro, dice la niña.
La condesa del reino de Castilla va
de pueblo en pueblo, buscando a su hermano torturado por el Chaco. Y se hace
mujer. Nos hace reír, tejiendo orgasmos.
(Se me salió el Zama de Lucrecia Martel).
VI
La escala es del amor, cuánto dura
qué no se tira un pitazo, y revientas glumorosa, el otro sinceramente es del
bando de los músicos.
Lunifica, es terrible (quizás en los bosques de hierro), y si todos se parecen a ti, la
descendencia pura y orgánica, mientras no abandones el cero, seguirás
dividiendo. Todos llegan a un fin, cuándo la muerte se va a dormir, yo muero.
VII
Epicuro quiere pruebas
de supervivencia, entre el cielo y la tierra, que toques, así, el centro
neurálgico y acrecientes tus bondades divinas. La inmadurez es como la niñez
eterna esclava del deseo.
Las enseñanzas del
joven telúrico, dan al traste consigo mismo. Hoy ha descendido al purgatorio, ve
más gente que de costumbre. Procura tormentos para enemistarse, y al final el
dedo en la boca dulce.
VIII
Tu un hombre interior, baste
decir interiorizado desde el seno de la muerte. De privadas batallas, cogen vuelo,
no vaya a maldecirte la sicópata figura.
¿Sí o no hicieron el hueco en Bajo el Volcán? En el gran latifundio, en
donde amanecen las grullas del septembrino.
Se priva de toda
grandeza, abandonando las necesidades de pedestal o vestal indígena. Des cobra
terramicinas.
j
Foto archivo del Central Park: M. Martinez, Gajaka, R.L.P.V., L.F.Batista, Sheila Candelario, Paco (amigo dominicano), L.F.larrea, y Robertico García. 2002.
Esta bueno pero te lo tiraste con lo de Pita Amor. Yo amo a Gabriel del Casal.
ResponderEliminarHay algo que me seduce, que me tira por Crimea, ja la bursitis. El Pedazo de mostaza deslizándose, y hasta qui llegué.
ResponderEliminarNanais cucas, te faltó.
ResponderEliminarViene corriendo la estatua?
ResponderEliminarPor las terramisinas. Velero de la tuberculosis, un bastidorcito de cuero de vaca? Ya me fui
ResponderEliminarGajis, ya te arreglé el problemita con Facebook.
ResponderEliminarYa puedes publicar el blog.
Cuida tu lenguaje erótico, erez5un hedonista.
mua mua mua, como dicen mis primas
Eliminarotra cosa son los números primos que no fallan.
No entendí el final, hablando de finales de clase, no, es diferente a Deniz, pero con mal final, tono disquesuza.
ResponderEliminarAlvaro Martínez.
ResponderEliminar2159.
ResponderEliminarLa dueña de qué? Que barbaridad.
ResponderEliminarCuántos nemes.
Shuass, memes
EliminarQue Caparicho extramitico. Un guión parece. Una ruta entre la inmensidad de la luz, o la tramoya en el indostan o Beiring
ResponderEliminarLa fotografía del Central Park con los poetas memorable.
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